Novela becada por el ministerio de cultura de España 2024
Después de veinte años enterrando su pasado en lo más profundo de su memoria, Charly se ve en la obligación de regresar a su pueblo natal en la provincia de Buenos Aires, lugar al que se juró jamás volver. El motivo del viaje: vender las tierras familiares y asegurarse de que su tío esquizofrénico y su abuela senil no terminen en la calle, o lo que es peor, muertos a manos de la conspiración que se cierne sobre ellos y sus valiosas tierras. Charly no solo deberá enfrentarse a los demonios que veinte años atrás lo obligaron a escapar, deberá sumergirse en un laberinto de verdades y mentiras donde el bien y el mal resultan una mera cuestión de perspectiva, pero sobre todas las cosas, deberá enfrentarse a las más profunda de las revelaciones: nadie puede escapar de sí mismo
Una noche oscura y silenciosa en la desértica plaza del barrio, Alain es sorprendido por la visita de un hombre igual o más extraño que sus ideas. Alain pudo haberse ido, como hubiese hecho cualquier otra persona, pero se queda. A medida que el hombre habla, Alain va convenciéndose cada vez más de las descabelladas teorías del insólito personaje, y empieza a sentir lo que este cree y siente, que vivimos en un espejo astillado y que lamentablemente las fracciones nos separan.
«A los diecisiete años de edad, Charles, en acto desesperado, coge un avión rumbo a lo desconocido. Ese mismo día, una vez el avión hubo cruzado la barrera de nubes, se promete a sí mismo no descansar hasta encontrar el lugar donde se sienta realmente libre. A medida que pasan los años, Charles empieza a darse cuenta de que cuanto más busca ese lugar, más se aleja de él, y que cuanto menos lo busca, más cerca lo siente»